jueves, 6 de junio de 2013

El conocimiento liquido de la realidad, Zygmunt Bauman

     Mucha gente, seguro que nunca se ha planteado aprenderse todos los nombres de las diferentes aves que viven alrededor suyo, estudiar todas sus características y demás. Pero hace uno años conocí a una persona que sí lo ha hecho.

     Un día caminando con él, por coincidencia, de repente señaló a una farola muy emocionado y me dijo: ¡Mira una Reyezuelo Lisado! Yo pensaba que me estaba vacilando, pero después me di cuenta de que encima de la farola había un pequeño pájaro. Según me contó mi amigo, el pájaro que vimos ese día era muy poco común y una de las pocas veces que lo había visto.

      Desde entonces he paseado con él muchas veces, y siempre me señala a los pájaros pequeños que sin él nunca les hubiera prestado mucha atención. Y desde ese día siempre me fijo en todas las aves que veo y me pregunto. ¿Cómo se llama esa especie? ¿Dónde vive? ¿De dónde viene?...


      Si esto se aplicara a todo en la vida la gente sería mucho más culta y caminaría por la vida con los ojos abiertos.

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